Comer bien y saludable en casa no es una tarea sencilla porque supone, mucha planificación y organización se trata de un proceso de adaptación en el que necesitas implementar varias rutinas que te permitan tener a la hora prevista todas las comidas que tú y los tuyos necesitan para estar bien alimentados y sentirse mejor para lograrlo hay varias tareas que puedes empezar a emprender desde ya, si quieres saber más sobre esas técnicas, entonces sigue leyendo el siguiente artículo.

Planifícate, inicialmente tienes que saber que es lo que vas a comprar con base en un intervalo de tiempo determinado, nosotros te recomendamos hacerlo por semana o cada 15 días, dependiendo de lo cómodo que pueden ser para ti cada una de estas planificaciones, del espacio que tienes en el refrigerador y también en tu despensa. Una vez a la semana, siempre el mismo día, planifica lo que comerán en el desayuno, en los almuerzos, meriendas y cenas de la semana entrante. Verifica qué ingredientes tienes y haz una lista de compras de lo que te hace falta para tenerlo todo a mano la semana entrante o los próximos días, en internet puedes disponer de muchos formatos, que te permiten precisamente hacer tus anotaciones con facilidad, es muy importante que varíes siempre los alimentos que consumes de igual modo su forma de preparación, porque de lo contrario todos se van a cansar o aburrir muy rápido, si consumen siempre lo mismo.

Pon la planificación del menú en un lugar visible, a los niños les encantará saber que comerán en cada ocasión y tú tendrás siempre a la vista los objetivos de cada semana.  

Compra todo lo que te haga falta, luego de establecer cuál será el menú de cada día y anotar los alimentos en una lista para que no se te olvide nada, programa un día para hacer las compras y así no tendrás que ir al súper varias veces, una vez que llegues a casa divide las raciones antes de guardarlas, para que puedas tener acceso a ellas con facilidad. Por ejemplo si compraste frutas secas para la merienda, guarda las raciones listas en pequeñas bolsas para tenerlas listas como refrigerio para cuándo las necesites.

Lo mismo puedes hacer con el resto de todos los alimentos, los puedes ir colocando en contenedores para tenerlos listos para usar y al momento que lo requieras.

Cocina todo lo que puedas con anterioridad, en dado caso de que no tengas tiempo, guarda los ingredientes pre cortados en el congelador, de esa manera podrán durante mucho más de lo que te durarían si solo los tienes guardados en el refrigerador.

Estos son algunos sencillos consejos para que prepares tus raciones de alimento de una manera muy sencilla y práctica, verás que esta forma estarás ahorrando tiempo y dinero, porque no se te echarán a perder los alimentos por comprar de más o por olvidarte de consumirlos.

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